El día 8 de septiembre se celebra la festividad de Santa María de la Vega, patrona de Salamanca. Con este motivo dan comienzo las ferias y fiestas de Salamanca que se prolongarán hasta el día 15 de septiembre.
Inicio de las Ferias y Fiestas de Salamanca
Pero el inicio real de todas estas fiestas que los vecinos de Salamanca y provincia esperan con alegría es la colocación de La Mariseca en la espadaña del Ayuntamiento de Salamanca. Este símbolo que se compone de un toro y la bandera española se suele poner el día 25 de julio coincidiendo con la festividad de Santiago, pero este año por motivo del triste accidente ferroviario en Santiago se ha retrasado hasta el día 29 de julio. Todos los salmantinos sabemos al levantar la vista hasta La Mariseca que las fiestas están cercanas. Esta curiosa tradición se remonta al siglo XV siendo la manera de anunciar todos los festejos taurinos que se celebraban en la ciudad de Salamanca a lo largo del año.
Con la ofrenda foral a nuestra patrona se inician las ferias y fiestas de Salamanca. Esta escultura de 72 centímetros compuesta por la Virgen y el Niño sentado en su rodilla está realizada en madera recubierta de cobre dorado y ornamentos en pedrería de colores. Es casi una cita obligatoria para los vecinos de Salamanca y provincia una visita a esta pequeña imagen de finales del siglo XII. El día 7 de septiembre, mujeres y hombres ataviados con sus trajes charros, con sus ramos y cestas de flores, realizan un vistoso desfile parando y bailando al son de la gaita y tamboril hasta llegar a la catedral y ofrecerle todas las flores a la Virgen. Es bonito ver esta comitiva donde se unen el fervor religioso, con el baile más tradicional y la alegría de los salmantinos. Los tamborileros, la vistosidad de los distintos trajes charros, la unión de todo un pueblo en torno a su patrona.
Los espectáculos en las calles, los conciertos en el incomparable marco de la Plaza Mayor, la feria taurina, actividades deportivas, el mercado medieval… todo ello junto con la Feria de Día que inunda toda la ciudad de Salamanca convierten a la capital en algarabía y bullicio durante la semana que se prolongan las fiestas.
Nuestro orgullo de pertenecer a Salamanca está más latente estos días. Toda la ciudad se siente incluida en las ferias y fiestas que se realizan ya que se pueden encontrar eventos para todas las edades y los salmantinos salimos a la calle para disfrutar una tarde con algún espectáculo de calle, pasear por el mercado medieval, tomarnos unos pinchos en la feria de día y acabar la noche en la Plaza Mayor escuchando algún concierto.