A 39 kilómetros de Salamanca, se halla la villa de Ledesma, municipio de unos 1.900 habitantes, declarado Conjunto Histórico-Artístico en 1975 debido a la riqueza de su patrimonio cultural, etnográfico y arquitectónico que conserva vestigios de las épocas prehistórica, romana y medieval. La singularidad de sus calles de estilo medieval, sus fachadas blasonadas y la presencia de edificaciones de los siglos XV al XIX, junto con su paisaje privilegiado, limítrofe con el Parque Natural Arribes del Duero, convierten a Ledesma en un destino muy frecuentado por turistas y visitantes.
La villa, se sitúa a 780 metros de altitud, bordeada en dos de sus extremos por el río Tormes, a cuyas orillas se extiende una gran variedad de vegetación de ribera junto a los característicos desniveles graníticos de la zona, que originados por el propio río, ofrecen un paisaje inigualable al visitante.
Ledesma aún conserva gran parte de la muralla de origen medieval, en cuyo extremo sudoeste, destaca el castillo, declarado Bien de Interés Cultural en 1949. Esta edificación conocida como la Fortaleza, fue erigida originariamente durante el siglo XII, en época de Fernando II de León, aunque de la primitiva construcción solo se conserva la puerta de arco apuntado, correspondiendo el castillo actual al siglo XV, recientemente restaurado y del que se conserva el patio de armas y dos habitaciones de época gótica.
Una fecha señalada en la villa es la tradicional festividad del Jueves de Corpus, durante la cual se engalanan las calles del casco antiguo con pequeños altares, tomillo y romero, y los balcones se visten con mantones y telas bordadas.
Otro de los atractivos que ofrece Ledesma, y que comparte en gran medida con Salamanca, es su gastronomía, de la que podemos destacar el hornazo, las patatas meneadas, la ensalada de Marujas, el cabrito y la carne de ternera de morucha.
Por último, decir que no se puede visitar la villa sin probar las deliciosas Rosquillas de Ledesma, dulce típico de pequeño tamaño (unos 2,5 cm. de diámetro) elaborado artesanalmente con huevos, leche, manteca, harina, azúcar y mantequilla.
Viajar a Ledesma con niños: Guía “Ledesma de cerca”
Para todos aquéllos que viajéis con niños, desde el Ayuntamiento de Ledesma, se ha editado una guía infantil, “Ledesma de cerca”, que a modo de álbum de cromos, propone a los más pequeños un viaje a través de la historia y la cultura de la villa en forma de itinerario-juego. A través de adivinanzas, juegos y cromos, los niños deben ir superando los retos que se van planteando en una actividad amena y divertida, a la vez que didáctica, a la que los adultos también pueden sumarse, convirtiendo así la ruta urbana en una actividad entretenida para toda la familia.
El material se puede adquirir, durante todo el año en el Centro de Interpretación de la Historia de Ledesma, en Bletisa (Iglesia de San Miguel), en el Ayuntamiento (Plaza Mayor) y en la tienda de artesanía Duende (calle San Miguel)